BY DAFOH
Washington, 24 de septiembre de 2015. ¿Podrá Xi Jinping poner fin a la sustracción forzada de órganos en curso de practicantes de Falun Gong, cristianos, católicos, tibetanos y otros grupos religiosos y minoritarios en China? El Papa Francisco describió el comercio de órganos como un crimen contra la humanidad y pidió el fin de la práctica inmoral.
Xi Jinping está en la posición principal para reformar el notorio historial de derechos humanos de China que se exacerbó con su predecesor Jiang Zemin, manchando a China con la sustracción ilegal de órganos humanos de presos de conciencia. La primera visita del presidente Xi a los EE. UU. es una oportunidad estratégica para definir y distanciarse del antiguo liderazgo infamemente corrupto.
“Poner fin a la atrocidad humanitaria de la sustracción de órganos de presos de conciencia es la prueba de fuego de un cambio creíble en China. Reconocer que los órganos fueron, y continúan siendo, sustraídos de presos de conciencia es un paso vital para poner fin a este crimen contra la humanidad. Después de décadas de sustracción forzada de órganos poco ética, con una probabilidad de que cientos de miles de chinos hayan sido asesinados por sus órganos, y la repetición de anuncios incumplidos para detener, la verificación independiente y transparente es obligatoria”, dice el Dr. Torsten Trey, Director Ejecutivo. , Médicos Contra la Sustracción Forzada de Órganos.
Cuando los funcionarios chinos anunciaron en diciembre de 2014, bajo la condena mundial, que terminarían con la extracción poco ética de órganos de prisioneros ejecutados para enero de 2015, muchas organizaciones occidentales aplaudieron en apoyo y se agarraron a esta paja. Sin embargo, los presos de conciencia fueron excluidos del anuncio y se desconoce el alcance total del abuso de este grupo de víctimas. A pesar de la creciente presión internacional para brindar transparencia, las autoridades chinas no han respondido.
Después de lanzar una persecución ilegal contra Falun Gong en 1999, el entonces presidente Jiang Zemin instigó la sustracción forzada de órganos contra el grupo, provocando un repentino superávit de decenas de miles de órganos que ha impulsado el crecimiento exponencial del negocio de trasplantes en China.
El escrutinio y el deber de cuidado por parte de la comunidad médica internacional siguen siendo moderados, y la reacción al secreto de China, las promesas fallidas de reforma y la falta de rendición de cuentas es insatisfactoria. Los grupos de derechos humanos han pedido al Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que instituya un proceso para determinar si China ha detenido la sustracción forzada ilegal de órganos. Y, ante la creciente preocupación mundial, más de 2,000,000 XNUMX XNUMX de personas han firmado una petición mundial escrita por DAFOH pidiendo a la ONU que actúe.
Médicos Contra la Sustracción Forzada de Órganos tiene como objetivo proporcionar a la comunidad médica ya la sociedad hallazgos objetivos sobre la sustracción ilegal y poco ética de órganos. La sustracción de órganos, la extracción de órganos de un donante, sin obtener previamente el consentimiento libre y voluntario, se considera un crimen de lesa humanidad, así como una amenaza a la integridad de la ciencia médica en general.